#Sinfonía39 #Mozart #FransBrüggen
LA SINFONÍA n.º 39 EN MI BEMOL MAYOR, K. 543
La Sinfonía n.º 39 en mi bemol mayor, K. 543, es una de las últimas sinfonías de Wolfgang Amadeus Mozart. Mozart finalizó su composición el 26 de junio de 1788 en un verano en el que compondría también sus dos últimas sinfonías: la n.º 40 (25 de julio), y la n.º 41 (10 de agosto).
Esta obra consta de cuatro movimientos:
🎵 I. Adagio - Allegro.
🎵 II. Andante con moto.
🎵 III. Menuetto: Trío.
🎵 IV. Allegro.
I. Adagio-Allegro, en Mi bemol mayor y compás de 3/4: La sinfonía comienza con un adagio de imponente solemnidad acentuado por los ecos de trompetas y timbales. Este mismo ritmo prosigue con insistencia hasta la entrada del Allegro, que viene precedido por una serie de compases de atrevidísima audacia armónica en las cuerdas (Algo verdaderamente prodigioso e inusual en la época) y de un instante de breve apaciguamiento. El Allegro brota con una delicadeza que contrasta con el ritornello que le sigue y cuyo vigor se acentúa con escalas de notable efecto dramático. El segundo tema, en si bemol, se lo reparten los violines y los instrumentos de viento y se sostiene, en su última parte, con los pizzicatti de los bajos. Esta primera sección concluye con la vuelta del ritornello y cuyo final va a servir de eje para el desarrollo de todo el movimiento. Se va modulando con maestría hasta la dominante de do menor que provoca que la atmósfera se vuelva más tempestuosa, antes de que vuelva la segunda parte del segundo tema, esta vez en la bemol.
II. Andante con moto, en la bemol y compás de 2/4. Este movimiento no deja de ser una marcha con dos partes, una serena y otra más animada, aunque sin la energía asociada a este término de “marcha”. Los instrumentos de viento, al descubierto, nos conducen hacia el intermedio en fa menor, inesperadamente dramático y con ecos que imitan el tema inicial. Seguidamente, una bellísima y expresiva cuerda ornamenta el canto, expuesto por los mismos instrumentos de viento y un contracanto que resalta los matices. Una modulación a Si mayor anuncia la repetición el intermedio, mágicamente modulado a tono menor un efecto tenso que se apacigua en la vuelta al modo mayor, aunque con una concisión un tanto inquietante.
III. Minuetto allegretto, en 3/4. Este movimiento, por sí sólo, justifica la completa audición de toda la sinfonía. Es una de las páginas más bellamente elaboradas por Mozart y su brevedad está complementada por repeticiones que nos saben a gloria. Indudablemente, el movimiento es gracioso, pero con un sello de seguridad y tranquilidad verdaderamente irreprochable. El tema principal, sereno y marcial, exquisitamente elaborado por la cuerda, da paso a la joya de este tercer movimiento y de toda la sinfonía, el trio: Un precioso laendler engalanado, gracias al protagonismo de los clarinetes, de irresistible ternura. La contestación de las cuerdas al motivo de los clarinetes, con el subrayado final de las trompas, es una de las secuencias musicales más logradas del genio salzburgués.
IV. Finale: Allegro, en 2/4. Sin apenas solución de continuidad, el tema principal es presentado en los primeros violines con una extraordinaria vivacidad e invade toda la orquesta hasta llegar a una cadencia plena de entusiasmo. El tema, no obstante, regresa modulando varias veces mientras es respondido irónicamente por los instrumentos de viento. También sirve para que dichos instrumentos se dediquen a realizar alegres y desenfadadas imitaciones, cuando el tema vuelve a reaparecer en do menor, después de la bemol, antes de que se llegue al desarrollo, todo un tratado en el arte de la modulación tonal, con idas y venidas, cada vez más audaces, que se deslizan de un instrumento a otro y que se recapitulan en una endiablada coda. Estamos ante la obra de un ser para quién la música ya no tenía ningún secreto.
@ClasicaAlAtardecer
LA SINFONÍA n.º 39 EN MI BEMOL MAYOR, K. 543
La Sinfonía n.º 39 en mi bemol mayor, K. 543, es una de las últimas sinfonías de Wolfgang Amadeus Mozart. Mozart finalizó su composición el 26 de junio de 1788 en un verano en el que compondría también sus dos últimas sinfonías: la n.º 40 (25 de julio), y la n.º 41 (10 de agosto).
Esta obra consta de cuatro movimientos:
🎵 I. Adagio - Allegro.
🎵 II. Andante con moto.
🎵 III. Menuetto: Trío.
🎵 IV. Allegro.
I. Adagio-Allegro, en Mi bemol mayor y compás de 3/4: La sinfonía comienza con un adagio de imponente solemnidad acentuado por los ecos de trompetas y timbales. Este mismo ritmo prosigue con insistencia hasta la entrada del Allegro, que viene precedido por una serie de compases de atrevidísima audacia armónica en las cuerdas (Algo verdaderamente prodigioso e inusual en la época) y de un instante de breve apaciguamiento. El Allegro brota con una delicadeza que contrasta con el ritornello que le sigue y cuyo vigor se acentúa con escalas de notable efecto dramático. El segundo tema, en si bemol, se lo reparten los violines y los instrumentos de viento y se sostiene, en su última parte, con los pizzicatti de los bajos. Esta primera sección concluye con la vuelta del ritornello y cuyo final va a servir de eje para el desarrollo de todo el movimiento. Se va modulando con maestría hasta la dominante de do menor que provoca que la atmósfera se vuelva más tempestuosa, antes de que vuelva la segunda parte del segundo tema, esta vez en la bemol.
II. Andante con moto, en la bemol y compás de 2/4. Este movimiento no deja de ser una marcha con dos partes, una serena y otra más animada, aunque sin la energía asociada a este término de “marcha”. Los instrumentos de viento, al descubierto, nos conducen hacia el intermedio en fa menor, inesperadamente dramático y con ecos que imitan el tema inicial. Seguidamente, una bellísima y expresiva cuerda ornamenta el canto, expuesto por los mismos instrumentos de viento y un contracanto que resalta los matices. Una modulación a Si mayor anuncia la repetición el intermedio, mágicamente modulado a tono menor un efecto tenso que se apacigua en la vuelta al modo mayor, aunque con una concisión un tanto inquietante.
III. Minuetto allegretto, en 3/4. Este movimiento, por sí sólo, justifica la completa audición de toda la sinfonía. Es una de las páginas más bellamente elaboradas por Mozart y su brevedad está complementada por repeticiones que nos saben a gloria. Indudablemente, el movimiento es gracioso, pero con un sello de seguridad y tranquilidad verdaderamente irreprochable. El tema principal, sereno y marcial, exquisitamente elaborado por la cuerda, da paso a la joya de este tercer movimiento y de toda la sinfonía, el trio: Un precioso laendler engalanado, gracias al protagonismo de los clarinetes, de irresistible ternura. La contestación de las cuerdas al motivo de los clarinetes, con el subrayado final de las trompas, es una de las secuencias musicales más logradas del genio salzburgués.
IV. Finale: Allegro, en 2/4. Sin apenas solución de continuidad, el tema principal es presentado en los primeros violines con una extraordinaria vivacidad e invade toda la orquesta hasta llegar a una cadencia plena de entusiasmo. El tema, no obstante, regresa modulando varias veces mientras es respondido irónicamente por los instrumentos de viento. También sirve para que dichos instrumentos se dediquen a realizar alegres y desenfadadas imitaciones, cuando el tema vuelve a reaparecer en do menor, después de la bemol, antes de que se llegue al desarrollo, todo un tratado en el arte de la modulación tonal, con idas y venidas, cada vez más audaces, que se deslizan de un instrumento a otro y que se recapitulan en una endiablada coda. Estamos ante la obra de un ser para quién la música ya no tenía ningún secreto.
@ClasicaAlAtardecer
Media is too big
VIEW IN TELEGRAM
#Sinfonía39 #Mozart #FransBrüggen
Título: Sinfonía nº39 en Mi bemol mayor KV 543.
Autor: Wolfgang Amadeus Mozart
Movimientos:
🎵 I. Andante - Allegro
🎵 II. Andante con moto
🎵 III. Menuetto (Allegretto)
🎵 IV. Finale (Allegro)
Interpretacion:
Orquesta del siglo XVIII
Director:
Frans Brüggen
🎼
@ClasicaAlAtardecer
Título: Sinfonía nº39 en Mi bemol mayor KV 543.
Autor: Wolfgang Amadeus Mozart
Movimientos:
🎵 I. Andante - Allegro
🎵 II. Andante con moto
🎵 III. Menuetto (Allegretto)
🎵 IV. Finale (Allegro)
Interpretacion:
Orquesta del siglo XVIII
Director:
Frans Brüggen
🎼
@ClasicaAlAtardecer
#Sinfonía39 #Mozart #FransBrüggen
LA SINFONÍA n.º 39 EN MI BEMOL MAYOR, K. 543
La Sinfonía n.º 39 en mi bemol mayor, K. 543, es una de las últimas sinfonías de Wolfgang Amadeus Mozart. Mozart finalizó su composición el 26 de junio de 1788 en un verano en el que compondría también sus dos últimas sinfonías: la n.º 40 (25 de julio), y la n.º 41 (10 de agosto).
Esta obra consta de cuatro movimientos:
🎵 I. Adagio - Allegro.
🎵 II. Andante con moto.
🎵 III. Menuetto: Trío.
🎵 IV. Allegro.
I. Adagio-Allegro, en Mi bemol mayor y compás de 3/4: La sinfonía comienza con un adagio de imponente solemnidad acentuado por los ecos de trompetas y timbales. Este mismo ritmo prosigue con insistencia hasta la entrada del Allegro, que viene precedido por una serie de compases de atrevidísima audacia armónica en las cuerdas (Algo verdaderamente prodigioso e inusual en la época) y de un instante de breve apaciguamiento. El Allegro brota con una delicadeza que contrasta con el ritornello que le sigue y cuyo vigor se acentúa con escalas de notable efecto dramático. El segundo tema, en si bemol, se lo reparten los violines y los instrumentos de viento y se sostiene, en su última parte, con los pizzicatti de los bajos. Esta primera sección concluye con la vuelta del ritornello y cuyo final va a servir de eje para el desarrollo de todo el movimiento. Se va modulando con maestría hasta la dominante de do menor que provoca que la atmósfera se vuelva más tempestuosa, antes de que vuelva la segunda parte del segundo tema, esta vez en la bemol.
II. Andante con moto, en la bemol y compás de 2/4. Este movimiento no deja de ser una marcha con dos partes, una serena y otra más animada, aunque sin la energía asociada a este término de “marcha”. Los instrumentos de viento, al descubierto, nos conducen hacia el intermedio en fa menor, inesperadamente dramático y con ecos que imitan el tema inicial. Seguidamente, una bellísima y expresiva cuerda ornamenta el canto, expuesto por los mismos instrumentos de viento y un contracanto que resalta los matices. Una modulación a Si mayor anuncia la repetición el intermedio, mágicamente modulado a tono menor un efecto tenso que se apacigua en la vuelta al modo mayor, aunque con una concisión un tanto inquietante.
III. Minuetto allegretto, en 3/4. Este movimiento, por sí sólo, justifica la completa audición de toda la sinfonía. Es una de las páginas más bellamente elaboradas por Mozart y su brevedad está complementada por repeticiones que nos saben a gloria. Indudablemente, el movimiento es gracioso, pero con un sello de seguridad y tranquilidad verdaderamente irreprochable. El tema principal, sereno y marcial, exquisitamente elaborado por la cuerda, da paso a la joya de este tercer movimiento y de toda la sinfonía, el trio: Un precioso laendler engalanado, gracias al protagonismo de los clarinetes, de irresistible ternura. La contestación de las cuerdas al motivo de los clarinetes, con el subrayado final de las trompas, es una de las secuencias musicales más logradas del genio salzburgués.
IV. Finale: Allegro, en 2/4. Sin apenas solución de continuidad, el tema principal es presentado en los primeros violines con una extraordinaria vivacidad e invade toda la orquesta hasta llegar a una cadencia plena de entusiasmo. El tema, no obstante, regresa modulando varias veces mientras es respondido irónicamente por los instrumentos de viento. También sirve para que dichos instrumentos se dediquen a realizar alegres y desenfadadas imitaciones, cuando el tema vuelve a reaparecer en do menor, después de la bemol, antes de que se llegue al desarrollo, todo un tratado en el arte de la modulación tonal, con idas y venidas, cada vez más audaces, que se deslizan de un instrumento a otro y que se recapitulan en una endiablada coda. Estamos ante la obra de un ser para quién la música ya no tenía ningún secreto.
@ClasicaAlAtardecer
LA SINFONÍA n.º 39 EN MI BEMOL MAYOR, K. 543
La Sinfonía n.º 39 en mi bemol mayor, K. 543, es una de las últimas sinfonías de Wolfgang Amadeus Mozart. Mozart finalizó su composición el 26 de junio de 1788 en un verano en el que compondría también sus dos últimas sinfonías: la n.º 40 (25 de julio), y la n.º 41 (10 de agosto).
Esta obra consta de cuatro movimientos:
🎵 I. Adagio - Allegro.
🎵 II. Andante con moto.
🎵 III. Menuetto: Trío.
🎵 IV. Allegro.
I. Adagio-Allegro, en Mi bemol mayor y compás de 3/4: La sinfonía comienza con un adagio de imponente solemnidad acentuado por los ecos de trompetas y timbales. Este mismo ritmo prosigue con insistencia hasta la entrada del Allegro, que viene precedido por una serie de compases de atrevidísima audacia armónica en las cuerdas (Algo verdaderamente prodigioso e inusual en la época) y de un instante de breve apaciguamiento. El Allegro brota con una delicadeza que contrasta con el ritornello que le sigue y cuyo vigor se acentúa con escalas de notable efecto dramático. El segundo tema, en si bemol, se lo reparten los violines y los instrumentos de viento y se sostiene, en su última parte, con los pizzicatti de los bajos. Esta primera sección concluye con la vuelta del ritornello y cuyo final va a servir de eje para el desarrollo de todo el movimiento. Se va modulando con maestría hasta la dominante de do menor que provoca que la atmósfera se vuelva más tempestuosa, antes de que vuelva la segunda parte del segundo tema, esta vez en la bemol.
II. Andante con moto, en la bemol y compás de 2/4. Este movimiento no deja de ser una marcha con dos partes, una serena y otra más animada, aunque sin la energía asociada a este término de “marcha”. Los instrumentos de viento, al descubierto, nos conducen hacia el intermedio en fa menor, inesperadamente dramático y con ecos que imitan el tema inicial. Seguidamente, una bellísima y expresiva cuerda ornamenta el canto, expuesto por los mismos instrumentos de viento y un contracanto que resalta los matices. Una modulación a Si mayor anuncia la repetición el intermedio, mágicamente modulado a tono menor un efecto tenso que se apacigua en la vuelta al modo mayor, aunque con una concisión un tanto inquietante.
III. Minuetto allegretto, en 3/4. Este movimiento, por sí sólo, justifica la completa audición de toda la sinfonía. Es una de las páginas más bellamente elaboradas por Mozart y su brevedad está complementada por repeticiones que nos saben a gloria. Indudablemente, el movimiento es gracioso, pero con un sello de seguridad y tranquilidad verdaderamente irreprochable. El tema principal, sereno y marcial, exquisitamente elaborado por la cuerda, da paso a la joya de este tercer movimiento y de toda la sinfonía, el trio: Un precioso laendler engalanado, gracias al protagonismo de los clarinetes, de irresistible ternura. La contestación de las cuerdas al motivo de los clarinetes, con el subrayado final de las trompas, es una de las secuencias musicales más logradas del genio salzburgués.
IV. Finale: Allegro, en 2/4. Sin apenas solución de continuidad, el tema principal es presentado en los primeros violines con una extraordinaria vivacidad e invade toda la orquesta hasta llegar a una cadencia plena de entusiasmo. El tema, no obstante, regresa modulando varias veces mientras es respondido irónicamente por los instrumentos de viento. También sirve para que dichos instrumentos se dediquen a realizar alegres y desenfadadas imitaciones, cuando el tema vuelve a reaparecer en do menor, después de la bemol, antes de que se llegue al desarrollo, todo un tratado en el arte de la modulación tonal, con idas y venidas, cada vez más audaces, que se deslizan de un instrumento a otro y que se recapitulan en una endiablada coda. Estamos ante la obra de un ser para quién la música ya no tenía ningún secreto.
@ClasicaAlAtardecer
Media is too big
VIEW IN TELEGRAM
#Sinfonía39 #Mozart #FransBrüggen
Título: Sinfonía nº39 en Mi bemol mayor KV 543.
Autor: Wolfgang Amadeus Mozart
Movimientos:
🎵 I. Andante - Allegro
🎵 II. Andante con moto
🎵 III. Menuetto (Allegretto)
🎵 IV. Finale (Allegro)
Interpretacion:
Orquesta del siglo XVIII
Director:
Frans Brüggen
@ClasicaAlAtardecer
Título: Sinfonía nº39 en Mi bemol mayor KV 543.
Autor: Wolfgang Amadeus Mozart
Movimientos:
🎵 I. Andante - Allegro
🎵 II. Andante con moto
🎵 III. Menuetto (Allegretto)
🎵 IV. Finale (Allegro)
Interpretacion:
Orquesta del siglo XVIII
Director:
Frans Brüggen
Fuente:
🎼@ClasicaAlAtardecer