ZONA ROJA ECUADOR

Quevedo: Tierra de Lobos

Quevedo: El Ayuntamiento Bajo el Yugo del Crimen Organizado

Corrupción, narcotráfico y extorsión: la oscura realidad tras el poder municipal

En el corazón de la provincia de Los Ríos, la ciudad de Quevedo se ha convertido en un foco de preocupación nacional. A medida que la violencia y la delincuencia se intensifican en sus calles, emergen alarmantes denuncias sobre la presunta vinculación de su alcalde, Alexis Matute, con poderosos grupos criminales. La sombra del narcotráfico, la corrupción administrativa y la extorsión parecen haberse arraigado en las instituciones locales, dejando a la ciudadanía en un estado de indefensión.
Un alcalde rodeado por el crimen

La denuncia presentada recientemente ante la Fiscalía General del Estado expone una red de presuntos vínculos entre el alcalde Matute y la banda delictiva Los Lobos, una de las organizaciones más peligrosas del país. Según los informes, Matute mantiene una estrecha relación con Luis Arboleda, alias "El Gordo Luis", quien lidera dicha banda en la región.

Lo más grave del caso es que se señala que Matute habría recibido apoyo financiero para su campaña electoral de parte de Arboleda y de Elvis Chang, esposo de la vicealcaldesa y un presunto narcotraficante de alto nivel. Este financiamiento ilícito, de ser comprobado, configuraría delitos graves como lavado de activos y financiamiento ilegal de campañas políticas.
La mafia dentro del municipio

El tentáculo del crimen no solo habría alcanzado al alcalde, sino que se extiende a diversas entidades municipales. Uno de los casos más preocupantes es el de la empresa pública de tránsito QUEVIAL, cuyo actual gerente, Janio Moreno, ha declarado abiertamente su pertenencia a la banda Los Lobos. Esto ha generado pánico entre la población, ya que la entidad encargada de regular el tránsito y la seguridad vial estaría operando bajo el control de un grupo delictivo.

De acuerdo con testimonios recogidos, los sistemas de multas y sanciones en la ciudad han sido convertidos en mecanismos de extorsión. Los ciudadanos temen impugnar las multas impuestas por QUEVIAL, ya que cualquier intento de reclamo podría desencadenar represalias por parte de la organización criminal que la administra en las sombras.
Extorsiones y secuestros: la nueva moneda de cambio

El impacto de estas conexiones mafiosas no se limita a la corrupción administrativa. La denuncia también señala que en Quevedo se ha establecido un sistema de terror, donde empresarios y comerciantes exitosos son víctimas de extorsiones y secuestros organizados desde los círculos de poder municipal.

Los métodos utilizados por estas redes criminales incluyen amenazas directas, confiscación de bienes y hasta desapariciones forzadas. La intención es clara: ahogar a los empresarios con pagos ilegales para garantizar su "seguridad" o apoderarse de sus negocios.
La presunta relación entre Elvis Chang, señalado como narcotraficante, y la administración municipal refuerza la hipótesis de que el crimen organizado ha infiltrado el gobierno local. Chang, según la denuncia, ha financiado no solo la campaña del alcalde, sino que también ha impulsado la expansión de bandas como Los Lobos, proporcionando recursos para su consolidación en Quevedo y otras zonas de Los Ríos.

Esto explicaría el preocupante aumento del tráfico de drogas en la ciudad, el incremento de homicidios vinculados al sicariato y la aparente impunidad con la que operan estas estructuras criminales.

Silencio cómplice y falta de acción

A pesar de la gravedad de las acusaciones, hasta ahora no ha habido un pronunciamiento oficial por parte del gobierno municipal ni de la Fiscalía. La ciudadanía, cada vez más atemorizada, teme que esta denuncia termine archivada, como muchas otras que han señalado la complicidad del poder político con el crimen.

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