Desde hace meses venimos alertando de que el genocidio que el Estado de Israel está cometiendo contra el pueblo de Palestina no sólo es terrible por el dolor irreparable e inimaginable que está produciendo en los palestinos y palestinas.
También lo es porque está destruyendo todos los consensos de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario que construimos tras la Segunda Guerra Mundial. Los últimos acontecimientos evidencian que la inacción ya no es una opción.
La complicidad de EEUU y los países europeos con el genocidio nos está arrastrando a una desestabilización total de la región de consecuencias imprevisibles. La violencia siempre, siempre la pagan los pueblos y no quienes la ordenan desde sus despachos.
Queremos una España trabajando de verdad por el fin del genocidio, rompiendo relaciones diplomáticas y suspendiendo la compraventa de armas a Israel. Queremos una España y una Europa trabajando de verdad por la Paz, que deje de hacer seguidismo de los EEUU.
También lo es porque está destruyendo todos los consensos de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario que construimos tras la Segunda Guerra Mundial. Los últimos acontecimientos evidencian que la inacción ya no es una opción.
La complicidad de EEUU y los países europeos con el genocidio nos está arrastrando a una desestabilización total de la región de consecuencias imprevisibles. La violencia siempre, siempre la pagan los pueblos y no quienes la ordenan desde sus despachos.
Queremos una España trabajando de verdad por el fin del genocidio, rompiendo relaciones diplomáticas y suspendiendo la compraventa de armas a Israel. Queremos una España y una Europa trabajando de verdad por la Paz, que deje de hacer seguidismo de los EEUU.