Los Grandes Cristales de la Atlántida han sido completamente activados.
Son tan enormes que literalmente son tan grandes como las pirámides de cristal en las que se encuentran.
Fueron cerrados y sellados en la caída de la Atlántida y programados para ser reactivados en este mismo momento, junto con los cristales lemurianos.
Cuando me reconecté con el cristal con el que trabajé en Atlántida, me sorprendió cómo uno podía literalmente fusionarse con el cristal, licuando el cuerpo físico para que se convirtiera en una puerta estelar y luego pudiera teletransportarse a cualquier lugar del universo. Luego regresaron, tomaron forma nuevamente y se fueron.
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Son tan enormes que literalmente son tan grandes como las pirámides de cristal en las que se encuentran.
Fueron cerrados y sellados en la caída de la Atlántida y programados para ser reactivados en este mismo momento, junto con los cristales lemurianos.
Cuando me reconecté con el cristal con el que trabajé en Atlántida, me sorprendió cómo uno podía literalmente fusionarse con el cristal, licuando el cuerpo físico para que se convirtiera en una puerta estelar y luego pudiera teletransportarse a cualquier lugar del universo. Luego regresaron, tomaron forma nuevamente y se fueron.
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Esto significa que en las últimas 48 horas hemos entrado en una frecuencia dimensional completamente nueva, el punto central de no retorno.
No podemos volver atrás.
Sólo podemos avanzar hacia nuestro destino final, la nueva humanidad, en la Nueva Era Dorada, porque estos cristales fueron programados para encapsular estas activaciones por el Sumo Sacerdocio de la Atlántida y Lemuria, que permaneció fiel a la Ley del Uno y ya había previsto este momento trascendental.
Observe cómo todo cambia, incluso los cuerpos celestes, tal como fue predestinado por mandato divino.
Todo en el amor, con el amor, por el amor.
Este es el gran despertar cuántico de las almas.
Judith Kusel
Esto significa que en las últimas 48 horas hemos entrado en una frecuencia dimensional completamente nueva, el punto central de no retorno.
No podemos volver atrás.
Sólo podemos avanzar hacia nuestro destino final, la nueva humanidad, en la Nueva Era Dorada, porque estos cristales fueron programados para encapsular estas activaciones por el Sumo Sacerdocio de la Atlántida y Lemuria, que permaneció fiel a la Ley del Uno y ya había previsto este momento trascendental.
Observe cómo todo cambia, incluso los cuerpos celestes, tal como fue predestinado por mandato divino.
Todo en el amor, con el amor, por el amor.
Este es el gran despertar cuántico de las almas.
Judith Kusel
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Forwarded from HoracioCaba
Aunque parezca un terreno difícil, se puede seguir floreciendo y regalando hermosos aromas.
Forwarded from 🐺La Cueva del Lobo Gris🐺 (Joseph Wolf ♓️)
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Luces turquesas en Tailandia.
Luces turquesas brillaban sobre Phuket.
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